Después de idas y vueltas, trajines y nervios, poco descanso y muchas corridas, llegó el día (mejor dicho la noche) en que Gabutti festejó su primer añito.
El sábado se presentó espléndido aunque el Servicio Metereológico amenazara lo contrario, augurando una velada de fiesta y diversión.
Cuando El Living estaba lleno y los Gabuttis circulando, llegó el momento de Valei, que irrumpió en el escenario acompañada de sus fieles laderos, Don Perro Mendez y Don Vasco Urresti, demostrando que la milonga vive y goza de buena salud.
"La flor rubia", "Baldosa floja" y "Se dice de mi" dejaron a la muchachada arrabalera con ganas de más, incluída la gran estrella Nini Marshal, que desde el balcón y con un Gabutti en la mano, se sumó al grito de "¡OTRA!" y sonó, nunca tan adecuada, "Entre curdas".
Como no sólo de pan vive el hombre, ni de milonga la mujer, Valei demostró sus dotes de anfitriona presentando al Titán de la Canción que luciendo un flamante y flameante traje que se ajusta perfectamente al poderío de este artista, arrasó con su rock n' roll hasta los últimos confines del lugar: "We will rock you", "Jump" y "Black night" fueron los temas que nos hicieron vibrar, siendo el punto cúlmine cuando, enardecido por la fuerza de esta música, cual Dios del rock, hizo añicos una guitarra y muchos corazones
Cuando ya parecía que el nuevo contendiente, al igual que tantos otros, no iba a presentarse, se escuchó un helicóptero e hicieron su aparición el multimillonario italiano Fredy Branco y sus sensuales bambinas intentando sobornar (como él y sus amigos acostumbran) al público presente, que sin embargo se mantuvo incorruptible, gabuttiano (y gabuttiado) hasta el fin.
Valei, omnipresente como toda diosa, ofició de árbitro de la contienda pero, cuando empezaron a volar las patadas, frenó este acto de violencia, tan lejano al espíritu Gabutti, y propuso un desafío cantado, que ambos adversarios aceptaron.
Comenzó a sonar "Humo sobre el agua" y Fredy Branco se adueñó (como hace siempre) del micrófono y tomó la ventaja, hasta que nuestro Titán le demostró como se canta "...fire on the sky". Entre tironeos del micrófono, fueron pasando las canciones, y cuando parecía que Fredy Branco estaba ganando la disputa, con la ayuda de sus bambinas (y quizá la complicidad del sonidista), un vaso de Gabutti le dio la potencia al Titán para derrotar definitivamente al itálico imperialista, que quedó mordiendo el polvo y escupiendo el bigote. De todas maneras, nuestro héroe, también llamado “El Magnánimo”, le ofreció al vencido un trago del milagroso Fernet para revivirlo y que pudiera disfrutar y bailar el Himno Gabuttiano, el Cuartetazo de Gabutti: Posteriormente el vencedor accedió gentilmente a sacarse fotos con sus fans, a cargo de Gustavo D’Assoro.
A partir de allí y durante el resto de la noche, se bailó hasta que dolieron las tabas gracias al buen gusto de DJ Valei, que nos ofreció un paseo sonoro por diversos paisajes rítmicos, teniendo todos un punto en común: hacer mover el esqueleto.
En resumen, todos los astros se conjugaron para hacer del aniversario de Gabutti una fiesta inolvidable; un lugar copado, un buen sonido, gente con ganas de divertirse (lográndolo) y, por su puesto, mucho Gabutti corriendo por las venas.
¡¡Hasta la próxima!!