El socio de Francesco Gabutti, mi abuelo materno, Esteban Cisaruk, abandonó la elaboración del Fernet porque “sin Francesco no es lo mismo” (también por temor al furioso comisario), y abrió un almacén de ramos generales, como para disimular.
Con el correr de los años, ya establecido como un respetado comerciante, se casó con Leocadia Keding y tuvieron 3 hijos: Elba, Elena y Victorio.
Esteban relató a su familia la trágica historia de Francesco (se contaba entre las filas de los que creían que habían caído bajo las garras del comisario) diciendo que había destruído la receta para garantizar que nunca la vuelvan a elaborar y así este brebaje no encendiera nuevamente los corazones atrayendo otra desgracia.
Lo que nunca imaginó es que esa receta caería en manos de su nieta menor que a la tierna edad de 5 años la descubre detrás de una foto de su abuelo y Francesco, en un viejo arcón.
25 años más tarde, en honor al amor de Francesco y Magdalena y sin temer represalias del comisario (al que supone muerto), decide sumar el Fernet Gabutti a la carta de productos de su emprendimiento familiar "Delicias por Vicky", convocando, nuevamente, multitudes (ahora en zona sur de Rosario).
“Una bebida puede llevar muchas hierbas, pero el ingrediente indispensable es el amor”.
Francesco Gabutti
Francesco Gabutti
Fernet Gabutti, la leyenda continúa